Hablamos con algunos de nuestros estudiantes de Máster sobre su recorrido académico desde el primer año del Grado de Química hasta la actualidad

Silvia, Naomi, Mario, Beatriz y Jorge David. Ellos son estudiantes del Máster Interuniversitario en Química Sintética e Industrial, del curso 2020/2021, y que organiza el IU CINQUIMA. Una promoción que no lo ha tenido nada fácil por la situación que se está atravesando con la pandemia del COVID-19. Pero si de algo se caracteriza esta nueva generación de investigadores es por su capacidad de esfuerzo, sacrificio y energía.

Diferentes caminos, mismo destino

Mario García, de Catálisis y Polímeros

Con distintos orígenes pero todos comparten la pasión por la Química, aunque cada uno se diera cuenta en un momento distinto de su vida. “Desde que empecé en el instituto me entró curiosidad por la Química. Siempre la he visto como algo que se me da bien y que disfruto, por eso escogí la carrera. Ya en el grado hubo años duros. Cuando llegó la hora de hacer TFG, viviendo todo el proceso, sentí que me gustaba todavía más y por eso hice este Máster, porque quería continuar con el camino”, explica Mario García, del grupo Catálisis y Polímeros.

“Yo vine a las jornadas de puertas abiertas que organizó la UVa cuando estaba en Bachillerato. Vi cómo hacían los experimentos, estuvimos en una visita por los laboratorios y ahí dije: ‘esto es lo mío’. Aunque hay algunas asignaturas un poco más interesantes que otras, la carrera me ha gustado bastante”, explica Silvia Cobos, del grupo Cristales Líquidos y Nuevos Materiales.

El gusto por la investigación en Química no tiene límites y muestra de ello es Naomi Sandoval, – también del grupo Cristales Líquidos y Nuevos Materiales-, y los 8.286 kilómetros que la separan de su familia. “Soy maestra de Ciencias Naturales e inicié mi carrera en la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán de Honduras, de donde soy. Inicialmente lo hice por el camino de la Biología, porque allí el grado de Ciencias Naturales te cubre parte de esa rama, además de la Física y la Química. Como te podrás imaginar, la parte que más disfruté fue la Química. Apliqué mediante una beca y aquí estoy, muy contenta por la experiencia en este máster”, señala.

Naomi Sandoval, del CLiNuMat

Casi todos los estudiantes que están a punto de embarcarse en la experiencia de la universidad barajan varias opciones a la hora de elegir qué carrera cursar. Esto le pasó a Beatriz Quevedo, que se encuentra trabajando en el Área de Polímeros de la Facultad de Ciencias, y a Jorge David Martín, del grupo Síntesis Asimétrica. “Siempre me ha gustado la ciencia y me he sentido muy atraída por este campo. Me planteé hacer Bioquímica pero al final opté por la Química. El grado tampoco fue fácil para mí, pero la experiencia en el laboratorio me encanta, así que lo seguí intentado hasta que la saqué”.

“En mi caso dudaba entre Física, Biología, Matemáticas… quería hacer algo relacionado con la ciencia. Una vez llegué a la carrera he estado muy a gusto, el tiempo que paso en los laboratorios lo disfruto y no me arrepiento de haberla escogido. Tampoco el máster”, relata Jorge David.

Los profesores, un apoyo a la hora de decidir

Una vez terminan los cuatro años de carrera es el momento de volver a elegir. Otra vez esa incertidumbre de plantearse qué es lo mejor para uno mismo. Como todo en la vida, y más concretamente en la investigación, las experiencias se basan en el ensayo y error. En el caso de nuestros estudiantes, el camino escogido ha sido el correcto.

Jorge David Martín, de Síntesis Asimétrica

Uno de los puntos fuertes del Máster Interuniversitario en Química Sintética e Industrial es el profesorado. Varios docentes que imparten asignaturas en el Máster también dan clases en el Grado de Química. Esto hace que los alumnos conozcan como trabajan, sus métodos, les consulten y puedan orientarles a la hora de dar el siguiente paso profesional.

“Silverio Coco, investigador del IU CINQUIMA, y director del grupo CLiNuMat, me me dio clase de Materiales Avanzados y me gustó su forma de impartir clase. Al final de curso, los últimos días, nos contó cómo funcionaba la investigación en el Instituto y me llamó la atención”, destaca Silvia.

La investigación, atrapa

El Máster del IU CINQUIMA está enfocado a la investigación, un trabajo difícil pero muy reconfortante. “En la carrera de Educación tuve un pequeño contacto con la investigación pero, obviamente, no es lo mismo una investigación de escritorio a una experimental. Está siendo una fantástica experiencia. Cuando vuelva a Honduras quiero motivar a mis colegas para hacer investigación más experimental”, cuenta Naomi.

“Son muchas horas las que inviertes pero me gusta trabajar en ello. Me encantaría dedicarme profesionalmente a la investigación. No me importa pasar tantas horas si estoy cómoda y cobro por ello”, señala Beatriz.

Silvia Cobos, de CLiNuMat

“La investigación es echarle muchas horas e igual en semanas no consigues que salga nada de lo que buscas. Luego das con la tecla y te empieza a salir todo. Pese a que en un primer momento pensamos que las horas invertidas en reacciones que no te ha salido han sido malgastadas, no es así. Porque seguro que a los compañeros del grupo les sirve”, señala Mario con acierto.

Gestionar la frustración

Como comenta Mario, en ocasiones a uno las cosas no le salen como querrían. Por ello es importante aprender a gestionar esos momentos. “Cuando los experimentos no salen es muy frustrante, aunque acaba mereciendo la pena. Nosotros estamos en los primeros años, así que es normal que cuando no conseguimos lo que buscamos pues estemos más decaídos. Al principio es normal que salgan más cosas mal que bien”, puntualiza Jorge David.

“Jorge tiene razón. Yo me frustro mucho, sobre todo cuando sé que he cometido un fallo y que la reacción no sale por culpa mía. Le doy muchas vueltas. Al final, estás un tiempo que te sale mal, te cabreas, pero sigues estando ahí”, comenta Beatriz. “Generalmente tenemos mucho contacto con los tutores y eso es muy necesario porque te ayudan a enfocarte en esos momentos complicados en los que igual no ves las cosas con mucha claridad”, afirma Silvia.

La práctica en el laboratorio, la joya del Máster

Beatriz Quevedo, del Área de Polímeros

Todos los alumnos coinciden en que, de toda la experiencia obtenida gracias al Máster, la parte que más han disfrutado está en los laboratorios. Ahí es donde se pasan la mayor parte del tiempo. “Lo mejor son las horas que pasamos en el laboratorio. Coges mucha experiencia y te vas desenvolviendo gracias a las horas que pasamos en él”, señala Jorge David.

Hay que recordar que las asignaturas del Máster se pueden impartir entre las ciudades de Bilbao, San Sebastián, Vitoria y Pamplona, además de en Valladolid, por lo que lo permite adquirir a los alumnos un conocimiento transversal que de otra manera no sería posible. “Las asignaturas de las otras dos universidades completan el conocimiento de las que se imparten en la UVa y son también muy interesantes. La semana que estuvimos en Vitoria estuvo muy chula”, explica Silvia.

Ahora que ven el final del Máster a la vuelta de la esquina, y el inicio de su carrera profesional, se abre un abanico de posibilidades ante ellos. Algunos continuarán en el Instituto dentro del Programa de Doctorado en Química: Síntesis Catálisis y Materiales Avanzados, otros lo intentarán por la vía de empresa privada, pero todos quieren seguir vinculados, de una u otra manera, a la investigación. Porque investigar es una forma de vida, y esa pasión se aprende en el IU CINQUIMA.

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